sábado, 29 de agosto de 2009

Taizé, diversidad y respeto

PepCastelló

Como podrán ver quienes entren en la página web de la Comunidad de Taizé [1], su ya remoto origen se sitúa en los tristes años de la segunda guerra mundial, cuando los ejércitos alemanes invadieron Francia y la locura nazi desencadenó una feroz persecución de judíos, gitanos y otros seres que en su ideario figuraban como inferiores. Allí el Hermano Roger de la Iglesia Calvinista y otras personas compasivas de diversas confesiones religiosas escondieron a cuantos pudieron e hicieron cuanto pudieron para ayudarles a huir. Taizé nació pues horizontalmente, con amplia vocación fraterna en favor del débil, del injustamente perseguido por el poder.

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4 comentarios:

  1. Moltes gràcies del teu article, Pep. Comparteixo tot el que dius de Taizé i voldria que l'Església Catòlica Romana fos un mirall que reflectís la bona nova evangèlica.
    Xavier

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  2. Pues sí, me ha movido el alma esta descripción de Pep Castelló sobre Taizé y cómo los occidentales nos inhibimos ante el dolor del mundo marginado
    pero...le pregunto a Pep:
    ¿qué podemos hacer los de a pie para luchar contra tanta injusticia?
    porque a mi me pesa mucho y mucho todo ese sufrimiento. A ver Pep!!!
    ¿Qué podemos hacer???
    Te saluda
    Paz Rosales
    de Barcelona
    pazrvq@yahoo.es

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  3. Moltes gràcies, Xavier, per la teva nota. Ben cordialment,
    Pep

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  4. A Paz Rosales,

    En primer lugar mi agradecimiento por tu nota. A continuación trataré de dar respuesta a tu pregunta con una que obtuve hace años en una conferencia sobre un tema similar a la cual asistí. A mí pregunta «¿que podemos hacer?», el conferenciante respondió: «tomar conciencia y difundirla».

    Es obvio que no quedé satisfecho, pues más que respuesta me pareció una escapatoria. Pero andando el tiempo llegué a entender que «tomar conciencia» es el primer paso que hay que dar para emprender el largo camino de humanización del cual nuestra forma de vida tanto nos aleja. Luego se tratará de caminar. A cada cual corresponde hallar su propio camino y el modo de avanzar por él; y por supuesto, encontrar compañía para el viaje.

    No sé si he dado respuesta a tu pregunta, pero si lo deseas podemos seguir conversando.

    Recibe mi más cordial saludo

    Pep

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