La nueva encíclica de Benedicto XVI Caritas in Veritate del 7 de julio último es una toma de posición de la Iglesia ante la crisis actual. El conjunto de las crisis que afectan a la humanidad y que conllevan amenazas severas sobre el sistema de la vida y su futuro, pediría un texto profético, cargado de urgencia. Pero no ha sido eso lo que hemos recibido sino una larga y detallada reflexión sobre la mayoría de los problemas actuales, que van desde la crisis económica al turismo, de la biotecnología a la crisis ambiental, y proyecciones sobre un Gobierno mundial de la globalización. El género no es profético, «el cual supondría un análisis concreto de una situación concreta» que posibilitaría emitir un juicio sobre los problemas a la vista en forma de denuncia-anuncio. Pero no está en la naturaleza de este papa ser profeta. Él es un doctor y un maestro. Elabora el discurso oficial del Magisterio, cuya perspectiva no viene de abajo, de la vida real y conflictiva, sino de arriba, de la doctrina ortodoxa que esfuma las contradicciones y minimiza los conflictos. La tónica dominante no es la del análisis, sino la de la ética, la de lo que deber ser.
Leer más...
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Éste es un lugar para compartir. Anímate y escribenos algo que te mueva el alma.