El laberinto o el amor buscando una salida

Nos quejamos a veces demasiado de la complejidad de nuestra vida. Y en ella está su grandeza.

Decimos que estamos en un laberinto sin salida, pero olvidamos que en un laberinto cada camino desemboca en otros, cada bifurcación conduce a otras, ningún punto está desligado de los demás, ninguna vida se comprende sin la interconexión con otras vidas.

Entrar, salir, salir, y entrar y comprendernos en este viaje de partida y llegada que es la trama de nuestras realidades.

¿Y yo? ¿Dónde estoy yo, nos preguntamos?

Como hemos afirmado tantas veces, somos en plural, nuestra historia es un acontecimiento relacional. Las identidades son plurales. Una misma persona puede ser varias realidades o identidades a la vez: ciudadana, feminista, creyente, hermana, vegetariana, novelista o poeta... Nos habita la diversidad que crece en cada encuentro.

http://www.vidalogia.webcindario.com/