Los dirigentes del mundo actual, unos dictadores oficiales y otros cobardes fantoches coaligados, no hacen más que sembrar de odio el mundo. El llamado terrorismo internacional palidece junto al suyo.
Siempre ha habido odio y siempre estuvo polarizado, pero ahora el odio, como todo, está también globalizado. Los pueblos de la cultura occidental odian a sus dirigentes, pero estos lo desvían hacia los dirigentes de otras culturas. Precisamente en las que hay petróleo. Y los periodistas, en su mayor parte, como las ratas son los vectores de la rabia, son los encargados de difundirlo y atizarlo. Me sospecho que es un odio similar al que precedió a la segunda guerra mundial.
Texto completo...
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Éste es un lugar para compartir. Anímate y escribenos algo que te mueva el alma.